Estatal

Los Carnavales en Sinaloa de Leyva

Por domingo 16 de marzo de 2014 Sin Comentarios

Por Juan Manuel Véliz Fonseca

Sinaloa-De-Leyva1Carnaval como su nombre lo indica y significa: “Adiós a la carne”. El carnaval es, en estos días, cuando la gente disfruta de las fiestas llenas de colorido y música, contagiándose de alegría al máximo. Los carnavales  deben celebrarse una semana  antes del Miércoles de Ceniza ya que forman parte de la Semana Santa y la de Pascua. Evitando no caer en el pecado y despedirse así, le dice: “Adiós a la Carne”.

En 1898 se celebró el primer carnaval debidamente reglamentado en el bello puerto de Mazatlán, que en realidad era un choque animado al calor del mezcal entre los del Barrio del Muelle y los del Abasto. Iniciaba con un encuentro a pedradas entre ambos barrios y continuaban los siguientes días con pocas variantes. Con el paso del tiempo el carnaval fue civilizándose y en lugar de piedras aparecieron  cascarones de huevo rellenos de harina, ceniza, negrumo, añil y cualquier polvo que tuviera un color chillante; luego aparecieron sus majestades, las reinas, los carros alegóricos, el confeti, las mascaritas y el malhumor con su testamento gracioso y picaresco.

En 1904 surgen los supuestos carnavales en la villa de Sinaloa que no eran otra cosa más que fiestas particulares entre la gente adinerada de aquel tiempo; nombraban a sus Reinas del Carnaval que surgía entre las familias con apellidos tales como Mussot, Rojo, Tarriba, Norzagaray, Alcalde, Peña, Canobbio, Echavarría. Y por supuesto la gente pobre no tenía acceso a estos eventos. Al iniciar el periodo revolucionario de 1910, se terminó con estas fiestas de carnaval.

Luego, de 1930 a 1950 vuelven a surgir. En esta etapa ya participa todo el pueblo a través de una convocatoria. En esta época siempre surgían dos candidatas. La reina se elegía de la que juntara más dinero. Por un lado se reunían algunos de  los “ricos” del pueblo y por el otro la candidata que apoyaban  los “pobres” que eran los más. Luego, entre ellas se escogían dos candidatas. Una la que sería la reina y la otra la princesa del carnaval. Esa misma noche bajo las notas musicales del baile se coronaba por la autoridad municipal a las jóvenes ganadoras. Otro día la reina del carnaval y la princesa hacían un recorrido por las principales calles del pueblo, entre besos al aire, saludos, confetis, serpentinas, mascaritas y finalizaba con la quema del “Malhumor” que era un personaje típico del pueblo, que dejaba un testamento heredando  sus bienes a determinadas personas del lugar, dándole un colorido humorístico a esta fiesta del carnaval.

La gente del pueblo de Sinaloa recuerda con cariño los reinados y competencia de esa época, como los de Josefina “La Fita” Canobbio, Enedina Valdez, Consuelo Valdez, Rosa María León López, Laurencia  Sandoval, Elisa Beltrán Zavala, Eva Araujo,  Leonor Higuera y demás. En entrevista a “La Pita” Camacho nos dice: “de esta época el reinado más recordado por la pasiones que se desataron y por lo cerrada que fue la competencia se recuerdo con mucho cariño el que se celebró en el año de 1935, entre Josefina “La Fita” Canobbio, que era apoyada por su familia, los Tarriba, los Rojo y otras, que eran los ricos de la villa de Sinaloa, y la profesora María Guadalupe León Ibarra, que fue apoyada por la gente pobre. Ella era hija de don Rafael León y doña Reynalda Ibarra. Ganó la candidata de los ricos. Recuerdo que fue paseada por las calles de Sinaloa en un carro alegórico el cual semejaba la figura de un cisne que fue arreglado por Pedro Rodríguez alias “El Cuete”; el baile del carnaval fue en el palacio municipal, había serpentinas, los confetis daban arriba de los tobillos, la música que alternaba era la Banda de Cirilo Herrera y la Orquesta de Camachito, quien era mi papá. También quiero decirte que en el año de 1938, yo acompañé como dama a la reina del carnaval Rosa María León López, ella era hija de don Nicolás  León y doña Antonia López, finaliza diciendo la entrevistada.

Sinaloa-De-Leyva2

Otra anécdota sobre este carnaval es la que cuenta el profesor Daniel Gámez Enríquez en sus vivencias: “La Fita Canobbio de la alta alcurnia y Lupita León de la clase media popular de las fiestas carnestolendas del año 1934-1935… para ganar hubo riñas  pelearon con ganas los pobres que apoyaban a Lupita, vendimos ajonjolí al tiempo, cacahuate, frijol, maíz, burros, chivas, vacas, caballos, mulas, ladrillo al tiempo, hasta días de trabajo. Ese sí fue carnaval de garra y los vivas a Lupita se oían por doquier y los de la Fita allá llegaba a oírse un viva solitario; para no alargarnos tanto ganamos vilmente, pero ahí va siempre un pero, debería decir “el pedo”: como don Manuel Tarriba se comprometió con los padres de la Fita que ella seria la Reyna  cueste lo que cueste y que sÍ perdía se pegaría un balazo en la sien y como en aquel entonces los hombres si cumplían lo que prometían, el Comité Central del Carnaval permitió arrimar varias talegas  o bolsas de dinero, pura plata sellada, casi los billetes no se conocían, para que en caso de detectar la perdida de la Fita, subir la bolsas de pesos y contabilizarlas, eran varias, hasta que por fin se cerró el cómputo, dándole el triunfo ficticio a la Fita, porque las bolsas de dinero estuvieron debajo del presídium del cómputo final, no entraron nunca a la contabilidad del Comité Central, ni el de apoyo a la Fita, así salvaron a Manuel Tarriba del balazo en la sien, si se lo hubiera dado.

Luego, de 1930 a 1950 vuelven a surgir. En esta etapa ya participa todo el pueblo a través de una convocatoria. En esta época siempre surgían dos candidatas. La reina se elegía de la que juntara más dinero. Por un lado se reunían algunos de  los “ricos” del pueblo y por el otro la candidata que apoyaban  los “pobres” que eran los más. Luego, entre ellas se escogían dos candidatas. Una la que sería la reina y la otra la princesa del carnaval. Esa misma noche bajo las notas musicales del baile se coronaba por la autoridad municipal a las jóvenes ganadoras. Otro día la reina del carnaval y la princesa hacían un recorrido por las principales calles del pueblo, entre besos al aire, saludos, confetis, serpentinas, mascaritas y finalizaba con la quema del “Malhumor” que era un personaje típico del pueblo, que dejaba un testamento heredando  sus bienes a determinadas personas del lugar, dándole un colorido humorístico a esta fiesta del carnaval.

La gente del pueblo de Sinaloa recuerda con cariño los reinados y competencia de esa época, como los de Josefina “La Fita” Canobbio, Enedina Valdez, Consuelo Valdez, Rosa María León López, Laurencia  Sandoval, Elisa Beltrán Zavala, Eva Araujo,  Leonor Higuera y demás. En entrevista a “La Pita” Camacho nos dice: “de esta época el reinado más recordado por la pasiones que se desataron y por lo cerrada que fue la competencia se recuerdo con mucho cariño el que se celebró en el año de 1935, entre Josefina “La Fita” Canobbio, que era apoyada por su familia, los Tarriba, los Rojo y otras, que eran los ricos de la villa de Sinaloa, y la profesora María Guadalupe León Ibarra, que fue apoyada por la gente pobre. Ella era hija de don Rafael León y doña Reynalda Ibarra. Ganó la candidata de los ricos. Recuerdo que fue paseada por las calles de Sinaloa en un carro alegórico el cual semejaba la figura de un cisne que fue arreglado por Pedro Rodríguez alias “El Cuete”; el baile del carnaval fue en el palacio municipal, había serpentinas, los confetis daban arriba de los tobillos, la música que alternaba era la Banda de Cirilo Herrera y la Orquesta de Camachito, quien era mi papá. También quiero decirte que en el año de 1938, yo acompañé como dama a la reina del carnaval Rosa María León López, ella era hija de don Nicolás  León y doña Antonia López, finaliza diciendo la entrevistada.

De la misma manera en años 1940-1950 se recuerda a un personaje que fue muy popular en los carnavales, como fue doña Veneranda Sandoval, con sus famosos versos: por aquí paso la Reyna/con su aguja y su dedal/preguntando donde vive/Veneranda Sandoval. También se le recuerda por su famoso baile “Del Juego y el Amor”

De 1960 a 1975, resurgen los carnavales en Sinaloa de Leyva y  desaparecen, por el encono de las pasiones y los supuestos arreglos del jurado calificador por su parcialidad favoreciendo a tal o cual candidata. Se polarizó mucho la cuestión económica y se fue perdiendo interés de participar por las jovencitas de esta época se pueden recordar algunos reinados: Profesora Adelita Sandoval, Carmelita Inzunza, Rosario “Chayito” Bojórquez, Guadalupe “Lupita” Sandoval López. Siendo este último carnaval de 1974, que se celebró con mucho entusiasmo en el desaparecido “Club Deportivo de Veteranos A.C., hoy oficinas del H. Ayuntamiento, a espaldas de la Unidad Administrativa Estatal.

Sinaloa-De-Leyva3

De 1976 al 2000, como fueron los reinados de 1979, Hermelinda Castro Fonseca; en 1981, de Gloria Ema Cervantes Vea y en 1998, Ana Cecilia Ramírez González.

Sinaloa-De-Leyva4

En el año 2003-2013 surgen los carnavales con los siguientes reinados:

(REYNA INFANTIL 2014 ES MICHELLE PAOLA VELIZ LLANES)

Sinaloa-De-Leyva5

Este 2014 el ayuntamiento de Sinaloa en coordinación con la secretaria de Turismo y el patronato ya lanzo la convocatoria y será del día 28 de febrero y 1 y 2 de marzo donde las muchachas ya se están inscribiendo para concursar para reynas del carnaval, que hoy se llama “Ritmos y Colores”.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.