Nacional

“Sonny, corazón norteño” La artesanía y la música

Por domingo 14 de noviembre de 2010 Sin Comentarios

Por Mario Arturo Ramos*

Tijuana es una ciudad donde se encuentra la música por todos los rincones y también las artesanías. Las dos expresiones artísticas conviven desde tiempos inmemoriales en la historia del México de la frontera. En el año 1992 en el estudio de grabación, Frida 83 ubicado en la zona norte de la ciudad fronteriza, mi carnal Ignacio Osornio me presentó a un joven de cabello largo llamado, Arnoldo Carrillo Guzmán, originario de Phoenix, Arizona -ciudad donde llegó al mundo el año de 1965-, quien guitarra en mano, me contó su intención de realizar una producción discográfica con canciones románticas orquestadas de forma bailable. En los primeros momentos del encuentro la charla derivo con el cantor que usa el nombre artístico de “Sonny” al comentario de que desde temprana edad se dedicaba al negocio familiar de comerciar artesanías mexicanas del otro lado de la frontera; que sus manos habían convertido el barro en macetas, ollas, pequeñas chimeneas y figuras que adornaban las estancias donde los “gringos” conservaban un poquito del mundo latino.

Nacho “El Profeta”, conocía al joven de Arizona desde pequeño y había guiado sus primeros pasos en el descubrimiento del instrumento musical que tanto le apasiona y al cual dedica todo su tiempo libre que le queda en su labor de empresario y artesano; por lo tanto en la aventura de grabar un disco compacto Osornio era su fiel compañero, coautor y director artístico. Han pasado 18 años del inicio de nuestra amistad, la cual se ha acrecentado recorriendo los caminos de EE. UU donde como todo cowboy conduce su camioneta con singular pericia, transportando artesanías y cantando. Yo lo acompaño como copiloto “quebuey” en la búsqueda de compañías grabadoras y entregas del producto que vende. Los logros son indudables ha publicado sus producciones en Balboa Records, Golden Disc, Orfeón y I M con singular éxito. Se ha presentado en diferentes escenarios como: Tucson; Phoenix, Los Ángeles, Modesto CA., Las Vegas, Nevada; Modesto, Nogales Arizona tal y tal hasta completar más de 30 ciudades americanas donde su música se escucha en las principales estaciones de radio. En la República Mexicana, Tijuana, Hermosillo, Querétaro, León Gto., Puerto Peñasco, Tecate, Mexicali etc. lo han visto cantar con su especial estilo que logra fusionar los boleros con el sonido norteño, creando una simbiosis que se baila y se canta por la masa.

En los últimos tiempos Sonny ha cruzado el océano pacifico, llevando su sonido a la República Popular China, Vietnam, Tailandia etc. países donde su oficio de comerciante y artesano tiene un gran respeto que le brindan los melómanos asiáticos por la admiración que despierta su habilidad para promover y desarrollar proyectos donde el color del trabajo artesanal mexicano impresiona y cautiva. Arnoldo cuenta que su afición por la música nacional nace desde niño; en el hogar paterno se escuchaban canciones interpretadas por Los Panchos, Pedro Infante, Lola Beltrán, Los Dandys y otros amorosos que amenizaban las tardes calurosas de Arizona; agrega que en su juventud lo impresionó Carlos Santana, Jerry García, Los Tigres del Norte, Banda Machos, Bronco, José Manuel Figueroa (Joan Sebastián) y el estilo de ejecutar la guitarra de Ignacio, que todas estas influencias fueron conformando su estilo y su proyecto de intérprete.

En cuanto a la otra parte de su vida, dice con su característico acento norteño con spanglish: “Mario, la canción es mi vocación, las que me dan de comer son las ollas y las macetas, gracias a ellas he aprendido a amar a México, país generoso que me llena de emoción cada que lo visito, por eso en mis presentaciones regaló a los asistentes, pequeños corazones de barro que contienen perfume, ese mi signo, ese es el camino”. Siempre que puede menciona a Osornio, a Luis Elorza, a Arnoldo Castillo, y a otros ejecutantes que han sido fundamentales en su proyección discográfica, estos son los motivos que le llevan a asegurar que las artesanías y la música (componiendo, cantando, grabando, dirigiendo) son el principio y final de la existencia de “Sonny, corazón norteño”.

*Autor e investigador.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Impreso N° 25
Siguiente entrada