DestacadosNacional

La voz en las alturas

Por domingo 31 de agosto de 2014 Sin Comentarios

Por Olivia Gorra*

pag 8 olivia gorra1La voz es esférica, transforma al universo,  sobre todo cuando en sus vibraciones lleva una carga emocional: la virtud de poder penetrar en lo más ínfimo de nuestro ser y conectarnos con el universo.

El sonido de la voz llega a todas partes como el brillo de las estrellas. Por eso, muchos artistas insisten en que las artes en todas sus vertientes,  armonizan las emociones con lo espiritual y que las artes nos vuelven sensible a lo bello, por lo tanto, quienes incursionan en lo artístico tienden a ser buenas personas.

A mí me tocó conocer la ópera cuando era muy joven. Fue una experiencia que me salvó de un fracaso total, quizás de ser una madre soltera, llena de hijos y de resentimientos, o una drogadicta fría.

La invitación a cantar mis primeros gorgoritos agudos surgió de una película del cine mexicano en los años 70s   protagonizada por Ernestina Garfias, actriz y cantante mexicana, capaz de alcanzar afinados y bien controlados agudos mientras bailaba en un vestido de princesa. Ella se convirtió en mi modelo a seguir.

La televisión fue el aparador que me mostró esa opción entre las artes escénicas, el cual me emocionó y me cautivó para siempre. así mismo la actuación me llamaba la atención pero me decidí por el canto.

Otras personas son seducidas por las bellas artes, directa o indirectamente a través  de la vista, el tacto, el olfato o del lenguaje. Yo he sentido que la música tiene formas, olores, sabores y colores.

Te puedo asegurar, desde mi experiencia personal, que el canto es un manjar generoso relleno de chocolate que me pone de buen humor.

El bel canto ha sido para mí, un vehículo que conecta a mi ser con lo divino. Muy seguido he vivido actos religiosos. Cuando estoy en esa conexión, me parece  que vivo mucho tiempo en ese trance multidimensional, cuando realmente son apenas unos segundo.

Ese momento tan único es difícil de explicar, es como  si tuviera los pies largos como las raíces de la Ceiba en la tierra y la parte más alta de mi cabeza rozando el cielo. Yo misma he sentido esa transformación. Cuando regreso de ese lapso de remanso vuelvo con otros ojos, con ánimos renovados y con una dulzura que no me pertenece.

Claro está: a mí se me acaba esa dulzura muy rápidamente, estar en este mundo no es fácil, un mundo en donde sobrevivir en la ópera es más difícil que picar piedra con la partitura en la luna.

El eterno vocalizar ha sido el pan nuestro de todos los días. Hacer gimnasia vocal una vez al día o cada tercer día, ayuda a estar en forma.

pag 8 olivia gorra2La técnica requiere entre otras cosas, repasar nota por nota todas las escalas, de arriba a  abajo, con todas las vocales y en diferentes tipos de escalas o arpegios (saltos musicales) hasta que las cuerdas vocales se estiren casi a su límite, y de esa manera obtener esa elasticidad que se requiere para  lograr un registro de sobra a la hora de la cantada.

El registro es la cantidad de notas que tus dos cuerdas vocales pueden alcanzar, desde lo más grave hasta lo más agudo. Este tratamiento operístico es como el de los bailarines, acróbatas, gimnastas o deportistas de alto rendimiento. La voz, hay que moverla, y conocer sus límites.

Debemos hacer que vibre todos los días si es posible para que esté lista en el momento que se quiera usar. Podría decir que los cantantes de ópera son deportistas vocales de alto rendimiento.

Existen algunos músculos que se involucran a la hora de cantar. Estos músculos tienen una memoria vocal, que conecta con una imagen en el cerebro, la cual muchas veces viene relacionada con algún sentimiento vivencial.

Esto se vuelve un patrón diseñado para la calidad y posición de cada nota. Por decirlo de otra forma, las cuerdas vocales es un instrumento que no se palpa, por tal razón, hay que dar cabida a la intuición y a la relación de imágenes. Todo esto se conjuga entre otras cosas con el conocimiento del funcionamiento de las vías respiratorias.

Para poder enseñar al alumno a cantar correctamente hay que concientizarlo de sus tendencias de uso apropiado o inapropiado de su voz.

Posteriormente se enseña al alumno a relajarse mientras canta para poder pulir todas las notas y darle esa redondez o color para que se parezcan entre sí sin que se noten los cambios naturales, que muchas veces se confunden con los vicios de una voz mal trabajada, la cual es difícil de sanar.

Todo esto que parece complejo, un cantante lo hace parecer muy sencillo. Pavarotti me dijo alguna vez: ¨Tu y yo cantamos como si no hiciéramos esfuerzo alguno. La gente te agradecerá más si les haces ver en tus expresiones corporales el trabajo que realmente requiere cantar ópera¨.

Yo sé que cualquier persona que habla  y respira sin problemas puede emitir sonidos más largos que los que común mente conocemos a la hora de hablar. El canto es la integración de varios elementos corporales y emocionales.

Se estudia y se practica  para concientizar que existe en nosotros  un instrumento, los cuales lleva un tiempo en coordinarlos entre ellos está uno de los pilares: el aire. El oído es fundamental, pero muchas veces hay que ¨afinarlo¨ escuchando música y con ejercicios lentos.

Por lo pronto yo quiero recomendarles que se tomen el tiempo para realizar actividades artísticas que nos calma y nos da eso que en la prisa de la vida perdemos por el estrés, nos da gentileza y suavidad para nuestras relaciones y quehaceres y lo más importante: Es terapia que nos hace felices y nos eleva el alma.

*Soprano de reconocida trayectoria nacional e internacional.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.