DestacadosEstatal

La Iglesia de la Villa de Sinaloa. Arqueología e Historia

Por viernes 15 de mayo de 2015 Sin Comentarios

Por: Gilberto J. López Alanís

DibujoLa iglesia de la villa de SinaloaHan pasado algunos años desde que fui invitado para fungir como jurado en un concurso de oposición en la ciudad de México, para examinar a un conjunto de aspirantes a ocupar una plaza de investigador sobre el proyecto “Las misiones Jesuitas en Sinaloa”, dentro de la estructura académica del Instituto Nacional de Antropología e Historia-Sinaloa.

El INAH-Sinaloa se había trasladado a Culiacán y fue precisamente en las instalaciones del Archivo Histórico General del Estado de Sinaloa (AHGS), donde encontró apoyo a su nueva etapa de trabajo bajo la conducción del Dr. José de la Cruz Pacheco, interesado en el proyecto misional jesuítico en el Noroeste Mexicano, en esa relación fue como fui propuesto a desempeñar la controvertida función de jurado.

Desde entonces conozco a Víctor Joel Santos Ramírez, por haber obtenido el fallo del jurado calificador con una propuesta coherente y mejor estructurada del conjunto de aspirantes; la decisión tomada en aquel momento, tuvo el peso de contar con un arqueólogo necesario al proyecto.

Hoy que se presenta este libro “La Iglesia de la Villa de Sinaloa. Arqueología e Historia”, sobre las excavaciones de lo que fue la parroquia misional de la villa de San Felipe y Santiago de Sinaloa y que se anuncia como Iglesia de la Villa de Sinaloa, me complace este fruto del autor, y, del INAH-Sinaloa, bajo la dirección del Arq. Francisco N. Ríos Avendaño.

Les confieso que al recibir la noticia de que sería comentarista del libro me sorprendió tal nominación, pero al hurgar en los archivos de la memoria, me recordé luchando con otros compañeros por posicionar en la UAS y DIFOCUR, la propuesta de una visión sobre la obra jesuítica en varios frentes. Quiérase o no, la historiografía es la terca evidencia de un trabajo cultural sobre el tema que ya tiene peso y vuelo empírico-teórico. La historiografía sobre los jesuitas en el Noroeste Mexicano está pendiente y esta presentación muestra su necesidad.

El Libro, abunda sobre cuestiones arqueológicas y arquitectónicas que los especialistas abordaran en su momento, por mi parte me refiero al Colegio de Sinaloa, que el autor incluye en la obra.

El tema del Colegio Jesuítico de Sinaloa rondaba en los Congresos de Historia de principios de los años cincuentas del siglo pasado, y los más cercanos Coloquios de Antropología e Historia de Sonora y los Congresos de Historia Regional de la UAS, incluso por omisión en la Historia General de Sonora produjo ciertas controversias, sin embargo en la conceptualización sobre el sistema misional en el noroeste desde Sinaloa lo habíamos incluido al publicar el Apologético y Puntual Manifiesto de 1657, del SJ Francisco Xavier de Faria en la Colección Rescate en 1981, y una serie de ponencias, aparte de la tesis “Educación y Evangelio en Sinaloa siglos XVI y XVII, para optar por el grado de maestría avalada por la UNAM de la investigadora del IIES/UAS, Laura E. Álvarez Tostado, publicada en el año de 1996, con documentación consultada en el AGN.

Todo esto urgió una investigación arqueológica que Víctor Joel Santos Ramírez supo encauzar posicionándose en el lugar, concitando apoyos municipales y federales contando con el apoyo de la población.

Creo que con este libro se cierra un ciclo historiográfico en Sinaloa referente a la constatación de la existencia material del Colegio de Sinaloa, a partir de la parroquia jesuítica de la villa de San Felipe y Santiago de Sinaloa que inició en forma de enramada, tuvo fábrica de cal y canto en varias etapas y la historiografía sobre el tema del Colegio, que está pendiente, ha demostrado que el Colegio existió.

Martín Pérez lo fundó y operó como Rector; Francisco Xavier de Faria los describió en sus aspectos fundamentales; por mi parte, me tocó sistematizarlo en el sistema misional del Noroeste Mexicano; Laura Álvarez Tostado Alarcón lo interpretó en la búsqueda indicial de los textos jesuitas existentes en el AGN y Víctor Joel Santos Ramírez, nos lo muestra adjunto, como parte de una “Iglesia” en su aspecto material.

Gracias.

* Director de archivo historico de Sinaloa

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.