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WISLAWA SZYMBORSKA, LA POESÍA

Por domingo 18 de agosto de 2013 Sin Comentarios

Por Leticia del Carmen Medina Troncoso*

¿Cómo explicar, como se inicia un texto? Retomo una frase del discurso de la Premio Nobel de Literatura 1996: “Se dice que en un discurso lo más difícil es siempre la primera frase”. Esta es la narración que les comparto el día de hoy.

Wislawa

Durante un viaje de Mazatlán a Mocorito, las largas horas y el tedio me invadían; un alma de poeta David Corro me prestó unos textos que me impactaron, eran poemas de Wislawa Symborska, que fui devorando conforme el camino se iba haciendo corto, por fin llegamos a nuestro destino, le regrese los poemas a David agradeciéndole su deferencia, el resto de la jornada de ese día, fue extenuante, de regreso a Mazatlán, platicamos de lo que me había parecido los poemas. La duda que crece como semilla que se siembra, quedó en mí desde ese día pero hoy me decido a escribir sobre ella. He navegado durante días por información, compilando todo aquello qu me permita descubrir: ¿Quién fue Wislawa Szymborska? Su biografía señala que nació en en Prowent, Polonia en 1923, cuando pequeña su familia se trasladó a Cracovia en 1931 donde vivó hasta su muerte. En cuanto terminó la secundaria entro a trabajar a ferrocarriles, poco después ingresó a la carrera de Lengua y Literatura Polaca en la Universidad Jagellónica de Cracovia pero truncó sus estudios debido a problemas económicos, pero es en ese periodo que empezó a publicar en periódicos, revistas y suplementos literarios como el Dziennik Polski en 1945; con 22 años de edad, en el año de 1952 apareció su primer poemario que después de 4 años pasó la censura, en 1953 entró a la revista Vida Literaria, también escribió una columna de crítica de 1968 a 1981. Algunas de sus obras durante ese periodo son: Por eso vivimos (Dlatego żyjemy, 1952), Preguntas mi misma (Pytania zadawane sobie, 1954), Llamando al Yeti (Wołanie do Yeti, 1957), Sal (Sol, 1962).

Uno de sus famosos poemas es: “Apelación al Yeti” escrito en 1957, poema donde rompe con el Partido obrero unificado polaco, por su carácter rebelde y aventurero Wislawa, entabla amistad con Jersy Giedroyc (escritor y activista político y editor de la revista Kultura ) quien la invitó a escribir en su revista también. Traductora de obras literarias del francés, perteneció a la Unión de Escritores y la Asociación de Escritores, y obtuvo numerosos honores y premios, como: el Premio de la Ciudad de Cracovia de Literatura en 1954, el Premio del Ministerio de Cultura de Polonia en 1961, el premio alemán de más alto prestigio el Goethe en 1991, el Premio Herder en 1995. La academia sueca la comparó con Mozart otorgándole en 1996 el prestigioso Premio Nobel de Literatura. Otros le llamaban la Greta Garbo de la poesía antes de ganar este prestigiado premio pocos conocían su obra, le escribe al amor, a la vida como en el poema: “Nada sucede dos veces…”

Nada sucede dos veces
ni va a suceder, por eso
sin experiencia nacemos,
sin rutina moriremos”

Los poemas de Wislawa tienen un detonante de lucidez y de ironía, a veces con visión pesimista amarga, pero que rayan en lo insólito a lo cotidiano, por ejemplo en el poema: “Hay quienes” describe a la gente con capacidad práctica, directa que desecha lo inservible que atente a su propia existencia, pero al final de poema aclara: “A veces los envidio pero afortunadamente se me pasa”. en entrevista concedida a Félix Romeo decía que escribía de forma espontánea, como si fuera dos personas, una que vive y goza sus poemas y otra quien los critica, su lenguaje es coloquial invadido de retórica y juegos de palabras, como en su poema “Reciprocidad” donde escribe”…una mirada vista..”, “”un sueno que arranca de un sueno..”, “..palabras que sirven para explicar palabras..”, Wislawa señala que sus poemas nacen del amor porque hasta el odio es una forma de amar “…a fin de cuentas lo que hay es ignorancia de la ignorancia”. Casada dos veces pero sin hijos en el poema “La Primera Fotografía de Hitler expresa ese enfoque maternal al imaginarse como sería él bebe y los ojos de una madre que pone todas sus esperanzas y expectativas en el recién nacido:

Cielito, angelito, corazoncito, amorcito, cuando hace un
año vino al mundo,
no faltaron señales en cielo y en la tierra:
un sol de primavera, geranios en las ventanas,
música de organillo en el patio,
un presagio favorable envuelto en un fino papel de color 
rosa”.

Le escribe al divorcio, a la dolorosa separación lo que representa para los hijos, las mascotas incluso los bienes materiales: “Para los ninos el primer fin del mundo de su vida, para el gato un nuevo dueno, para el perro una nueva duena..” Le siguen poemas como: “Mil alegrías, un encanto”, 1967, “Si acaso”, 1975, “El gran número”, 1976, “Gente en el puente”, 1986, “Lecturas no obligatorias”, 1992,“Fin y principio”,1993, “De la muerte sin exagerar”, 1996, “Paisaje con grano de arena”1999,”Instante”, 2002,”Poesía no completa”, 2002, “Dos puntos”, 2005, “Amor feliz y otros poemas”, 2007, “Aquí”, 2009.

En el primer párrafo de este texto retome la primera frase del discurso de Wislawa ante la Academia de los Premios Nobel en 1996 titulado: “No sé qué gente”, en él emula a Sócrates y desarrolla la mayéutica de manera magistral, describe lo que es un poeta y lo compara con otras profesiones que se consideran más respetables, se autodenomina escritor y no poeta, lo extraño que puede parecer a la gente común que tú te denomines poeta o seas capaz de describir lo sencillo y cotidiano con palabras de la lengua de la poesía, las palabras no pesan como piedra, donde la inspiración es el motor de búsqueda para algunos que osan transgredir el mundo cotidiano y llevar a cabo sus más grandes sueños y verlos realizados, cosa que no es posible para todos pues van más allá de lo verosímil, de lo imaginable, de lo alcanzable, ese tipo de gente que no sabe que las motiva, o que no sabe porque lo hace, para el poeta el reto más grande es el papel en blanco.

Sus poemas siempre tienen alfa y omega, un principio dulce y cautivador y un fin desolador y trágico pero siempre real, siempre verdadero con dotes de cruel, miel y hiel “… Te he sobrevivido lo suficiente para recordarte desde lejos...”, Fin y Principio, 1993. Incluso en su epitafio escrito por ella misma antes de su fallecimiento el primero de febrero de 2012 a los 88 años:

Aquí yace, como la coma anticuada,
la autora de algunos versos,
descanso eterno tuvo a bien darle a la tierra,
a pesar de que la muerta con los grupos literarios no se hablaba.
Aunque tampoco en su tumba encontró nada mejor
que una lechuza, jacintos y este treno:
transeúnte quita a tu electrónico cerebro la cubierta
y piensa un poco en el destino de Wislawa.

Mujer de mirada dulce y sencilla, de aspecto pulcro y sereno, fue comparada con Mozart por la armonía en sus poemas, con Greta Garbo por la fuerza enigmática de la interpretación que le daba a la vida a través de sus palabras, inspiración para muchos, para mí, un recorrido de aprendizaje.

*Educadora y autora.

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