Por Juan Manuel Véliz Fonseca*
Orad por ella, porque sus restos descansen en paz.
Eran las 10.00 horas de la mañana, del 12 de febrero del 2013, cuando arribó frente a la Casa de la Cultura de Sinaloa de Leyva la carroza que trasladaba los restos de Julia Pastrana. Venía acompañada de un fuerte dispositivo de seguridad; se había acordado que de llegar temprano allí estaría el tiempo suficiente para llegar a la explanada cívica municipal a las 11.00 horas en punto, pero no se aceptó bajarla por los protocolos de seguridad y se siguió de frente.
Había una gran expectación no sólo entre los habitantes de este municipio y de su cabecera, sino por la asistencia de personajes de otras latitudes, como Guasave, Los Mochis, El Fuerte, Mocorito, Choix, Angostura, Salvador Alvarado, es más, de todo el estado. También había periodistas extranjeros, nacionales como Televisa, TV Azteca, así como Homero Ardijis, periódicos Reforma, El Universal y otros como El Debate, Noroeste y noticieros radiofónicos como La Mera Jefa y Chávez Radio Cast, historiadores como el presidente de la crónica nacional Crescencio Montoya Cortez, presidente de la crónica estatal Carlos Francisco Tavizon Lopez, Gilberto López Alanís, director del Archivo Histórico General del Estado, cronista Adrian García Cortez, funcionarios como el propio gobernador Lic. Mario López Valdez, la directora del Instituto Sinaloense de Cultura, Lic. María Luisa Miranda Monreal, Lic. Saúl Rubio Valenzuela, presidente municipal, diputado local Arturo Báez Soto, presidente estatal de los Derechos Humanos, doctor Juan José Ríos Estavillo, y la directora estatal de ISMUJER, Lic. Elizabeth Ávila Carrancio. Era una fecha histórica para la ex villa de San Felipe y Santiago hoy Sinaloa de Leyva, por eso lo importante del acto que ese día se desarrollaría.
La ceremonia se celebró de manera impecable, pero para antes el cuarteto de cuerdas del ISIC, interpretaba melodías sinaloenses. El féretro con los restos de Julia Pastrana fueron colocados, sobre un templete, el ataúd de color blanco, un arreglo floral, una leyenda colocada en marco de madera que decía: Julia Pastrana, nació 1834, México/ + 1860 Rusia, Culiacán, Sinaloa 11 de febrero de 2013. A su lado derecho una vitrina con el acta de defunción; en la mampara se leía lo siguiente: “Recepción y Sepulcro de la Sinaloense: Julia Pastrana (1834-1860). Los logotipos de Gobierno del estado, ISIC, municipio de Sinaloa y Universidad de Oslo, Noruega, tres coronas de tripié, gobierno del estado, Ayuntamiento de Sinaloa e ISIC. A sus costados dos lonas sostenidas por mujeres con el siguiente texto: “Sinaloa lindo y querido, si muero lejos de ti que digan que estoy dormido y que me traigan aquí. El otro: “No más discriminación y violencia contra la mujer”. Enseguida el mensaje del Lic. Saúl Rubio Valenzuela en el que en resumen dijo: “No más Julias Pastranas en el mundo, no más falta de respeto a la dignidad de los derechos humanos” le siguió el testimonio y breve explicación del caso de Julia Pastrana. “Aquí culmina mi investigación de más de 10 años por repatriar los restos de julia Pastrana, que ya descansarán en paz gracias a este acto de justicia y dignidad humana, del gobierno de Noruega y del gobierno mexicano, principalmente el gobernador Lic. Mario López Valdez y autoridades del municipio donde nació”; y finalizando el gobernador constitucional de Sinaloa Mario López Valdez con el siguiente mensaje: “Este evento de Julia Pastrana es un acto de justicia que registrara la historia y la humanidad”. Acto seguida se montaron algunas guardias. Luego se levantó el ataúd y se trasladó hacia la iglesia de San Felipe y Santiago contigua ala explanada cívica. Allí se le ofició una misa de cuerpo presente por los presbíteros: José de Jesús Nieto Calderón, Agustín González y Francisco Ruiz, bajo los cantos de los Niños del Coro de Bamoa, que dirige el maestro Francisco Javier Chan Peñasco. Terminada la misa salió el cortejo fúnebre, atrás de la carroza iba a pie la gente del pueblo (Me hubiera gustado que la comitiva del gobernador se hubiera sumado) y una banda regional que interpretó en su recorrido varias melodías como “Te vas ángel mío”, “Una página más” , “Los amores de Julia” entre otras. Luego se enfiló por la calle Daniel Gámez Enríquez, dio vuelta por la calle Madero, luego dos cuadras abajo, dobló a la izquierda por la avenida Héroes del 47 y dio vuelta por la calle doctor Isauro Vallejo para llegar al Panteón Histórico Municipal. Ya instalado el ataúd en la cruz del perdón, “Goyo” y “El Chino” de los hermanos Cota, con sus trompetas interpretaron “Ave María”. Se levantó el ataúd y fue colocado en las bandas electrónicas donde fue bajado a la fosa bajo las notas musicales del “El Sinaloense” y “Las Golondrinas”, no sin antes depositar encima del féretro miles de flores blancas deseándole su eterno descanso. Ya cubierta la fosa se le colocaron las piezas del monumento que guardarán y cuidarán sus restos. Encima de una placa se lee lo siguiente: “Julia Pastrana 1834-1860. Artista reconocida por su trayectoria Internacional. Repatriada de Oslo, Noruega a Sinaloa, México. Sepultada el 12 de febrero de 2013. Julia Pastrana, descansa en paz. Gobierno del Estado de Sinaloa. H. Ayuntamiento de Sinaloa. Terminando así con 153 años de una vida errante hasta encontrar la paz en la tierra que la vio nacer.
*Profesor de la FCA / UAS. Sinaloa de Leyva.
