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EL ROMANTICISMO EN EL ARTE

Por domingo 22 de julio de 2012 Un comentario

Por Alberto Ángel El Cuervo*

Como siempre, la plática con Nacho, invitaba a la reflexión y sobre todo a la investigación y revisión de la Historia del Arte…

—Amado Nervo ¿debe ser considerado romántico…?

—Sí, aunque más bien caería dentro del período considerado como postromanticismo no obstante que se nutre del apogeo del romanticismo, con Bécquer, por ejemplo…

—Entonces, mi Cuervo ¿qué piensas del romanticismo… Sucede lo mismo en la música que en las otras artes?

—Bueno, es necesario hacer una revisión de esa etapa… O tal vez sería más adecuado decir de ese movimiento o escuela artística…

—Es decir… El Romanticismo ¿no es solamente un estilo en la música o en la pintura…?

—Pues no… Es mucho más que un estilo… Podríamos decir que es un verdadero movimiento cultural, político y social…

—Soy todo oídos, mi Cuervo… Si surge alguna duda te interrumpo…

Tendríamos que comenzar por revisar la definición que hace nuestro regidor máximo del lenguaje, el Diccionario de la Real Academia de la Lengua… Coloquialmente, nos dice que romanticismo, es “cualidad de romántico, sentimental” pero esa no es la primera acepción… Lo primero que nos decribe el diccionario es: Escuela literaria de la primera mitad del siglo XIX, extremadamente individualista y que prescindía de las reglas o preceptos tenidos por clásicos. La segunda acepción lo describe como una época de la cultura occidental en que prevaleció tal escuela literaria. Todo lo anterior nos puede dar una idea de lo importante que fue el Romanticismo. Pero revisemos lo que nos dicen los enterados desde el punto de vista de la Historia y Filosofía del Arte. Con el nombre de Romanticismo, se define al movimiento filosófico, literario y artístico que se inicia en los últimos años del siglo XVIII… Se inicia el Romanticismo, en Alemania y en el Reino Unido como un verdadero movimiento social, político y cultural. Los Románticos, verdaderamente se rebelan contra el Clasisismo, contra lo establecido, contra lo académico y el Racionalismo y se pregona la importancia del sentimiento como punto de partida para la creatividad… La libertad total es uno de los axiomas que caracterizan a esta verdadera revolución cultural, la rebelión contra los preceptos establecidos en el arte clásico y sus estereotipos… El romanticismo, surge de un movimiento filosófico anterior que se da en Alemania llamado Sturm und Drang, nombre original de un drama escrito por Maximiliam Klinger en 1776 y que significa: Tempestad e ímpetu. De ahí que lo tomaran como bandera para el movimiento que justamente se oponía a quedarse estacionados en el mero raciocinio. Es Fitche quien propone ir hasta el infinito en el sentir y a él se debe la primera inspiración del Romanticismo. En cuando al origen del término desde el punto de vista etimológico, hay algunas diferencias, pero se supone que deriva de la palabra francesa roman, que significa novela. En las novelas francesas, el sentir era ponderado a grado máximo y, consecuentemente, a quienes seguían ese sentimentalismo comenzó a llamárseles romanticos. De ahí que quienes conformaban el grupo del movimiento cultural en cuestión, hayan adoptado el nombre de románticos, porque se oponían a lo clásico que predicaba reglas y razón y ellos optaron por el sentir y el rebelarse contra el raciocinio. El Romanticismo, puede decirse, comienza en la literatura, pero influye, a grado de incluirlas, a otras artes tales como la pintura y la música. El movimiento romántico en las artes, busca en síntesis: El yo como entidad autónoma con toda su fantasía y sentimiento; crear con la genialidad de un universo propio; la valoración de lo diferente frente a lo común; el liberalismo frente a un despotismo ilustrado; la originalidad frente a la tradición clasisista, la obra debe ser única en tanto que sentir; la creatividad en contra de la imitación de lo antiguo en el arte y la obra imperfecta e inacabada frente a la perfecta y cerrada. Existe en el romanticismo un individualismo, un subjetivismo muy especial y una tendencia nacionalista muy intensa. Así, en la literatura, la obra en prosa cobra una intensidad individual muy fuerte de ahí que se vuelvan populares las autobiografías. En la poesía, se rompe con las formas establecidas… Se abandona la métrica y la rima obligada, surge la asonancia y tendencias similares verdaderamente revolucionarias… En la pintura, de igual manera, surge el Romanticismo como oposición a lo clásico, a las normas, totalmente acorde al movimiento político y cultural que pregonaran Shiller, Byron y Lamartine en sus respectivos países. Movimiento, no debemos olvidar, no solamente artístico o cultural sino también político que se diera previamente a estallidos sociales tales como la Revolución Francesa. El Romanticismo en la pintura pasa por tres períodos: el llamado preromanticismo que se desarrolla de 1770 a 1820 aproximadamente. Le sigue el apogeo romántico, que va de 1820 a 1850 y por último, la llamada tradición postromántica entre 1850 y 1870. Lógicamente, en la pintura, la oposición a lo clásico también era una característica relevante, aunque no se limita sólo a ello. La pintura romántica, busca el misticismo, el sentimentalismo, la expresión de los sueños… El propio Charles Baudelaire, con motivo de la inauguración del salón de pintura de 1846, escribe: «El romanticismo no se halla ni en la elección de los temas ni en su verdad exacta, sino en el modo de sentir. Para mí, el romanticismo es la expresión más reciente y actual de la belleza. Y quien dice romanticismo dice arte moderno, es decir, intimidad, espiritualidad, color y tendencia al infinito, expresados por todos los medios de los que disponen las artes.» Cabe recordar aquí, que Baudelaire, no solamente era un gran escritor, sino uno de los considerados mejores críticos de arte. Caspar David, Delacroix, Goya, Pierre Paul Prudhon, y por supuesto Turner, son entre otros, los principales exponentes del Romanticismo en la pintura. Por el lado de la música, sucede algo parecido a las otras artes. Es oposición a lo clásico, es la subordinación de la forma al tema. Por escuela romántica en música, se debe entender al grupo de espíritus embarcados en aquel movimiento que comenzó en Alemania con Bethooven y Weber y fue continuado por Mendelssohn, Schuman y Wagner. En Francia por Berlioz y Chopin así como Liszt han sido considerados como los exponentes del Romanticismo por antonomasia. Por supuesto, que aunque surge esta escuela como opositora al clasisismo, debe considerarse que toda composición musical tiene mucho de romántica, en tanto que intensa, emocional, individual y en ocasiones nacionalista. El Romanticismo en la música, se ha considerado como programático. Es decir, la música programática es la que tiene por objetivo evocar ideas o imágenes extramusicales en la mente del oyente y así, representa una imagen o un estado de ánimo en su ejecución. Así, por ejemplo, la sexta sinfonía de Bethooven ha sido llamada un “poema musical” debido a su capacidad evocativa…

—Claro que no hay que olvidar que el Maestro Bethooven se mueve entre el clasisismo y el romanticismo… Fue el último clásico y el primer romántico…

—Hay algo que tampoco hay que olvidar, mi estimado Maestro Gutiérrez…

—Qué es lo que no hay que olvidar, Maestro Cuervo…

—Que ya anunciaron el vuelo a Guadalajara y si no abordamos ahorita se nos va jajajaja.

*Cantante, compositor y escritor.

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